Con ganas de conocer ciudades en Navidad, nos hemos escapado a Valencia.
Nos hemos encontrado con una ciudad llena de detalles navideños por todos los rincones.
Balcones y ventanas con iluminaciones elegantes, decoradas con guirnaldas llenas de luces.
Calles llenas de luces con diferentes temáticas.
Colorido y movimiento te hacen vivir una época mágica y llena de ilusión.
Hemos visto pocos árboles de Navidad,
pero los pocos que hay están muy bien situados, con sus belenes a los pies,
enseñando la esencia de la Navidad.
Nos encantó la Plaza del Ayuntamiento,
con el carrusel, la pista de patinaje, las luces, y un gran árbol.
No pudimos ni patinar ni subirnos a los caballos,
había demasiada gente, pero su esencia era mágica.
Si algo nos ha encantado ha sido el logro de poder iluminar la ciudad
sabiendo lo bien que están iluminados los edificios y balcones.
Mucha luz, pero ninguna sobra.
Y encontrarnos con belenes llenos de gente, de vida, eso nos ha cautivado.
Ha sido una escapada mágica, hemos podido conocer la Navidad valenciana
y no nos ha decepcionado, nos ha encantado, es una Navidad con verdadero espíritu.
No dejéis de pasear por el Mercado Colón, el Central, la Plaza del Ayuntamiento,
la Plaza de la Virgen y todas las calles del centro,
dejaros llevar por las luces y callejear sin parar, no os defraudará.
¡¡Gracias Valencia por dejarnos conocer vuestra Navidad!!
