Chinchón, pueblo de la Comunidad de Madrid
que queríamos conocer con mucha curiosidad.
Empezamos conociendo su famosa Plaza Mayor.
Tan fotogénica, tan monumental.
Es una plaza irregular, es la plaza del pueblo,
punto central de actividad donde se establece el mercado,
donde se realizan fiestas, donde tomar algo en sus restaurantes,
donde se realizan corridas de toros y otros espectáculos...
Casas con soportales y balcones del siglo XV.
Su color verde y respetar la madera
se debe al deseo de sus vecinos de mantener su esencia, su origen.
Y desde luego, ese aspecto la hace única.
Pasear por sus calles, perderte entre casas abiertas y cerradas.
Buscar gatos y perritos.
Disfrutar caminando, es un plan apto para sillas y bebés.
Mirar por los agujerillos de las puertas,
deporte nacional de nuestros niños...
Sus calles son auténticas,
Se ha construido por necesidad, con los años,
por eso se ven casas más altas, más bajas,
de orientación diferente,
pero todas mantienen esos colores blancos y arena,
junto con el verde característico de la localidad.
Casi todo el pueblo es peatonal,
así que si quieres dejar de tener "atados" a los más pequeños,
vas a caminar con tranquilidad.
Hay varios puntos para ver en toda la localidad:
desde varios conventos, al castillo, iglesias,
calles, la plaza...
Una excursión divertida, tranquila y familiar.
