Valverde de los Arroyos (Guadalajara)

El otoño, sus colores, sus hojas, sus atardeceres,
su encanto hay que disfrutarlo en lugares como este destino:
Valverde de los Arroyos en Guadalajara.

Un pueblo lleno de frutales como manzanos y castaños,
donde la gente de allí vende sus frutos para poder sacarse unos euritos.
Y nos llevamos, y están bien ricos.

El pueblo es poco conocido, pero bien bonito que es.
Todo peatonal y apto para carritos y minusválidos,
pero cuidado, hay cuestas para poder llegar hasta la última casa
o a las cascadas y los campos de castaños.

Callejear y descubrir su gente, sus casas,
somos cotillas y nos encanta mirar y conocer.

El más pequeño es un disfrutón y sigue a sus hermanos,
pero pronto le seguirán a él.

Sus árboles son reposo, invitan todos a acercarse.

Todas las casas siguen la misma línea, empedradas y acogedoras.
Pero cada una es diferente por su vegetación.
Ésta les llamó la atención por sus hojas tan oscuras.

Y es que las hojas de otoño van desde los verdes,
amarillos, ocres, marrones a negro.

Salimos a buscar el otoño por petición de Mateo.
Él quería ver colores, hojas caer, algo de fresco...
Y nuestra aventura nos llevó a este pueblo,
un descubrimiento y volveremos en primavera
para la floración de los castaños y los manzanos.
Valverde de los Arroyos, en Guadalajara.